Una mujer en el mundo narco

Por Luciana Bedini

 

Ficha técnica: Griselda. Origen: Estados Unidos. Creadora: Ingrid Escajeda.
Actores: Sofía Vergara, Ernesto Alterio, Vanessa Ferlito, Alberto Ammann y Alberto Guerra.

Griselda es una serie de Netflix que trata sobre la vida y obra de Griselda Blanco, narcotraficante colombiana que construyó un verdadero imperio de crimen y drogas en Estados Unidos.

La también llamada madrina o viuda negra huye de Colombia con sus tres hijos, buscando darles una casa y una vida digna, y qué mejor lugar para eso que Estados Unidos con su pomposo american dream. Allí, tras un breve intento de ganarse la vida de manera lícita, comienza a construir un negocio que consistía en hacer viajar desde Colombia a mujeres con cocaína escondida. Pero la cosa no era tan fácil, porque la escena del narcotráfico en Miami tenía actores consolidados y era extraño que una mujer buscara disputarles ese lugar.

No malinterpreten: sus aspiraciones no eran para nada feministas. Como muchos estudiosos del tema señalan, Griselda asesinaba a sangre fría sin remordimientos y había empezado su camino delictivo teniendo apenas 12 años. Acá la serie se toma algunas licencias, y hace de ella un personaje más flexible para acercarlo a la simpatía del espectador. Hasta podemos pensar que es ingenua o inexperta en ciertos aspectos, o que incurre en la maldad sólo si hay un “justificativo”.

En esta misma línea, algunos diálogos quieren investir de épica acontecimientos que, en verdad, tienen más que ver con un ejercicio despiadado de la violencia y con la lógica del ojo por ojo que se le suele atribuir al negocio narco. Pero si consideramos que la serie se enfoca en las vivencias de Griselda, podemos entenderlo como una estrategia narrativa para representar cómo la ambición tenía en ella un efecto casi narcótico que terminaría por dilapidar el destino de muchas vidas, incluida la suya. Si sus acciones parecen más épicas que macabras es porque ese es su punto de vista de los hechos.

Griselda es construida como un personaje complejo y lleno de contradicciones, que exige la lealtad de sus subordinados y de sus allegados, pero les soltaría la mano al momento que ve la posibilidad de ser traicionada. Era tan calculadora que encontró la forma de ir presa cuando ella lo dispuso, sorteando la pena de muerte y logrando cumplir menos años de los que correspondían si se hubieran probado la cantidad de asesinatos que había cometido. El episodio cinco, Paraíso perdido, explora a fondo su personalidad, su capacidad de dominar y engañar a la gente y sobre todo su voluntad de priorizar el bienestar suyo y de sus hijos.

Esa complejidad es brillantemente representada por Sofía Vergara, quien nos convence de que ella es quien es hasta por la forma de aplastar el cigarrillo en el cenicero, convirtiéndose por esta interpretación en la primera mujer latina en ser nominada al Emmy.

Griselda llega a ser una serie memorable también por sus elecciones visuales y sonoras. En la estética visual utiliza recursos que logran con acierto representar el encierro, la ambición, el ejercicio del poder y la violencia. El reflejo de los fuegos artificiales en la cabeza de Griselda es una imagen ejemplar. En el plano sonoro, un juego interesante de transición de música incidental a música diegética genera una sensación de inmersión en la historia que vale la pena resaltar, sobre todo porque toma canciones que hablan de una época, construyendo una escena más amplia que la sola historia.

Luciana Bedini

Estudiante de Comunicación Social – UNR

Le gusta el cine, la literatura y la filosofía.